✔️ Por qué es clave ver el espacio en persona antes de darte un presupuesto.
✔️ Qué pasos seguimos para que no tengas sorpresas ni sustos durante la obra.
✔️ Nuestra forma de hablar claro: lo que se puede hacer y lo que no merece la pena.
✔️ Consejos prácticos que aplicamos en cada reforma como si fuera nuestra propia casa.
¿Te estás planteando hacer una reforma en casa y no sabes por dónde empezar? Tranquilo. Es más común de lo que crees. La mayoría de personas que nos llaman lo hacen con las mismas dudas: “¿cuánto me puede costar?”, “¿necesito permisos?”, “¿por dónde empiezo?”
En esta guía queremos ayudarte a entender bien qué implica una reforma, cómo enfocarla desde el principio y qué pasos seguir para que todo salga como esperas. Sin agobios, sin sustos y con los pies en la tierra.
Aquí no vas a encontrar promesas irreales ni soluciones mágicas. Te hablamos desde la experiencia de haber reformado decenas y decenas de viviendas, la mayoría de las que hacemos son reformas en Gandía, y siempre con un objetivo claro: que la obra sea un acierto, no un quebradero de cabeza.
¿Por qué muchas personas deciden reformar su vivienda?
Hay muchas razones por las que alguien decide hacer una reforma. Algunas veces es porque la vivienda se ha quedado anticuada, otras porque se ha comprado un piso viejo para ponerlo a punto, y otras simplemente porque la familia ha cambiado y toca adaptar el espacio.
¿Merece la pena reformar en lugar de mudarse?
No siempre compensa mudarse. A veces, por menos de lo que cuesta cambiar de casa, puedes convertir tu vivienda en lo que realmente necesitas: más funcional, más moderna y más cómoda.
Además, si la ubicación es buena y la estructura del inmueble lo permite, reformar suele ser una decisión más inteligente y rentable a medio y largo plazo.
Cambios que suelen motivar una reforma
- Falta de espacio o necesidad de redistribuir mejor.
- Baños o cocina antiguos o poco funcionales.
- Mejorar aislamiento térmico y acústico.
- Actualizar instalaciones eléctricas o de fontanería.
- Ganar luz natural y sensación de amplitud.
- Aumentar el valor de la vivienda si se va a alquilar o vender.
Tipos de reformas más habituales (y cuál necesitas tú)
No todas las reformas son iguales. Algunas son más estéticas, otras más funcionales y otras lo cambian todo de arriba abajo. Lo importante es que tengas claro qué tipo de reforma necesitas tú antes de lanzarte, porque no es lo mismo cambiar unos azulejos que rehacer toda una instalación eléctrica.
Reforma integral
Es la más completa. Se toca prácticamente todo: distribución, suelos, paredes, instalaciones, ventanas, cocina, baños… Suele hacerse cuando:
- La vivienda es muy antigua y necesita una puesta a punto general.
- Acabas de comprar un piso que quieres dejar “a tu gusto”.
- Quieres redistribuir espacios para aprovechar mejor la superficie.
Eso sí, requiere una buena planificación y un presupuesto claro desde el principio, para evitar sustos por el camino.
Reforma parcial: cocina, baño, suelos…
Aquí hablamos de obras más localizadas. Muy comunes cuando una zona concreta ya no cumple su función o está desfasada.
- Reformas de cocina: más funcionalidad, mejor distribución, muebles nuevos…
- Reformas de baño: cambio de bañera por ducha, nuevo alicatado, grifería moderna…
- Cambio de suelos o puertas: para renovar el aspecto sin hacer obra mayor.
Reforma estructural o rehabilitación
Este tipo de reformas son más técnicas y requieren siempre asesoramiento profesional. Hablamos de:
- Refuerzo de forjados o estructuras.
- Reparación de humedades o problemas en cubiertas.
- Rehabilitación de fachadas o elementos comunes.
Muy habituales en comunidades o en viviendas antiguas del centro de Gandía, donde conviene revisar bien el estado del edificio antes de empezar.
Así es como solemos trabajar una reforma
Antes de nada, hay que verlo en persona
No se puede valorar una reforma sin ver el espacio. Así de claro. Cada vivienda es un mundo. Nos lo enseñas, nos cuentas qué quieres hacer, y te decimos lo que vemos realista. Qué se puede hacer, en qué orden, y si hay cosas que conviene repensar.
A veces se puede hacer todo lo que tienes en mente. Otras veces, no merece la pena tocar según qué cosas. Pero eso sólo se ve estando allí, con calma y con alguien que sepa mirar con ojo.
Presupuesto bien hecho. Sin sorpresas ni letra pequeña
Nada de “desde 10.000€” y luego ya veremos. Lo que hacemos es darte un presupuesto desglosado: qué se hace, con qué materiales, y cuánto cuesta cada cosa. Todo claro desde el principio.
Y si hace falta un arquitecto o proyecto técnico, te lo decimos y te ayudamos a gestionarlo. Sin líos.
Papeles, permisos y organización (nos encargamos nosotros)
Muchas reformas necesitan licencia del ayuntamiento. O avisar a la comunidad. O coordinar que llegue el material a tiempo. Tú no tienes por qué saber todo eso. Para eso estamos nosotros. Lo gestionamos y lo planificamos todo para que las cosas salgan bien desde el minuto uno.
Se empieza la obra y… a controlar cada paso
Cuando arranca la reforma, toca hacer las cosas bien y sin dejar nada al aire. Los trabajos tienen un orden, y cada uno tiene que hacerse bien para que lo siguiente no falle.
Durante la obra, te vamos contando los avances, te mandamos fotos si hace falta, y si hay que tomar una decisión, se habla. Sin sustos. Así es como lo hacemos siempre.
Preguntas clave que deberías hacerte antes de empezar
Antes de meterte en una reforma, conviene pararse un momento y hacerte algunas preguntas con calma. Porque muchas veces el problema no es la obra… sino empezar sin tener claro lo que necesitas de verdad.
Estas son las preguntas que solemos hacerle a nuestros clientes cuando vienen al local o nos enseñan su casa. Y sí, marcan la diferencia.
¿De cuánto presupuesto real dispones?
No se trata de gastar lo mínimo, ni de tirar la casa por la ventana. Se trata de tener claro hasta dónde puedes llegar sin hacer malabares, y ajustar la reforma a ese presupuesto. Así podemos ayudarte a priorizar lo más importante y dejar el resto para más adelante, si hace falta.
A veces con un buen planteamiento se consiguen resultados espectaculares… sin pasarse de la raya.
¿Qué es lo que no te convence de la vivienda?
Hay quien dice “quiero reformarlo todo”, pero cuando preguntas un poco más, resulta que el problema es el baño. O la cocina. O que hay poca luz.
Cuanto más claro tengas qué quieres mejorar (y por qué), mejor podremos plantearte soluciones útiles. Porque una reforma no se trata solo de cambiar cosas por cambiar. Se trata de que la casa funcione mejor para ti.
¿Te interesa hacerlo todo de golpe o prefieres ir por partes?
No todo el mundo puede o quiere hacer una reforma integral de una vez. A veces conviene empezar por lo urgente, o por lo que más impacto tiene, y dejar el resto para más adelante.
Nosotros te lo decimos claro: si no es el momento de hacerlo todo, se puede planificar por fases. Bien pensado, sin duplicar esfuerzos ni gastos.
¿Cómo elegir una empresa de reformas en Gandía y que sea de confianza?
Aquí es donde muchos se la juegan. Porque una reforma puede ser una maravilla… o un desastre, dependiendo de quién te la haga. Y esto no va solo de precios. Va de confianza, trato y resultados.
Que tengan experiencia (y que te la enseñen)
Una empresa seria no te cuenta lo que hace, te lo enseña. Fotos de trabajos anteriores, opiniones reales de otros clientes, reformas similares a la tuya… No hay mejor garantía que ver lo que ya han hecho y cómo ha quedado.
Que estén cerca, para lo que haga falta
Trabajar con una empresa local, como nosotros en Gandía, tiene ventajas claras: estamos cerca, podemos hacer visitas rápidas, responder dudas en persona y estar ahí si después surge cualquier cosa.
Que te den presupuestos claros, sin letra pequeña
Nada de sustos. Nada de “esto no estaba incluido”. Un buen presupuesto es el que te explica bien qué se va a hacer, cuánto cuesta cada parte, y qué está incluido. Así, si luego hay un cambio, sabes por qué y cuánto supone.
Consejos prácticos para evitar errores y sobrecostes
Una reforma mal pensada no solo cuesta dinero. También quita tiempo, energía y te deja con la sensación de haberlo hecho mal. Aquí van algunos consejos sencillos que damos siempre:
No te fíes solo del precio
Si algo parece demasiado barato para ser verdad, probablemente lo sea. Un presupuesto que se queda corto suele esconder materiales de poca calidad, trabajos mal hechos o costes que aparecerán después.
Decide los materiales desde el principio
Cambia esto, sube esto, mete esto último… Cada cambio durante la obra es un pequeño lío. Cuanto más cerrado tengas el diseño y los materiales antes de empezar, mejor irá todo.
Ten un margen de imprevistos
Aunque esté todo bien planteado, siempre puede salir algo que no se veía: una tubería antigua, una pared mal aislada, un retraso en un pedido… Deja un pequeño margen en tiempo y presupuesto. Así no hay estrés si pasa algo.
¿Necesitas que te ayudemos con tu reforma en Gandía?
Si estás dándole vueltas a hacer una reforma, pero no sabes por dónde empezar, lo mejor es hablarlo en persona. Nos lo enseñas, nos cuentas lo que te gustaría mejorar, y te decimos cómo lo haríamos nosotros. Sin rodeos, sin compromiso.
Te diremos lo que haríamos si fuera nuestra casa. Y luego tú decides.
Puedes escribirnos por WhatsApp, llamarnos o pasar por nuestro local en Gandía cuando te venga bien. Estaremos encantados de ayudarte.
SIN COMPROMISO
>> Solicita aquí tu presupuesto de reforma en Gandía